Unos 5 mil uruguayos requieren por año atención de cirujanos vasculares. Esta especialidad cuenta con excelentes técnicos, quienes trabajan procurando que la tecnología se incorpore cada vez más tomando en cuenta los adelantos que existen en otros países del mundo.
En las últimas semanas el médico mercedario Sebastián Sarutte Roselló culminó exitosamente el posgrado de cirujano vascular.
En la pasada jornada estuvo en Mercedes el grado 5 de dicha cátedra Dr. Alejandro Esperón, quien al referirse a la culminación del posgrado del profesional mercedario, afirmó que “lograr gente joven con talento es muy importante ya que nuestra especialidad es pequeña, dada la poca oferta de formación que se tiene al año. En otras especialidades como anestesia o cirugía general, se tienen unos 20 residentes por año, mientras que en nuestra especialidad hasta el año pasado hemos tenido un residente por año, por lo que es importante elegir bien a quiénes van a salir adelante con esta carrera porque sino el recambio se detiene. Para nosotros cada uno que termina su posgrado de cirugía vascular es fundamental, ya que son quienes continuarán lo que nosotros estamos haciendo ahora.
Sabemos que es una especialidad exigente y en Uruguay debe haber unos 20 cirujanos vasculares en actividad”.
Esperón afirmó que en Uruguay como en otros países del mundo existen problemas para la formación del recurso humano, aunque indicó que nuestro país es uno de los lugares más estables.
Reconoció que la carrera de médico es la más extensa, en Uruguay se necesitan siete años para obtener el título y para cumplir con la residencia se requieren otros cuatro o cinco más, para luego entonces sí aspirar en el mercado laboral.
A nivel de formación el profesional señaló que Uruguay cuenta con excelentes médicos, pero que en muchas áreas como la cirugía vascular se está lejos en cuanto a la incorporación de tecnología. En nuestro país -afirmó- se pelea a todo nivel y los médicos, tanto a nivel mutual como público, buscan aportarle lo mejor a la población y la especialidad vascular en particular, busca que toda la tecnología sea accesible dejando de lado el criterio económico, porque se entiende que se debe tener lo necesario para asistir a los pacientes.
Esperón dijo que se ha conseguido un diálogo con las autoridades, ya sea del Ministerio y del Fondo Nacional de Recursos, para transitar un camino juntos y lograr que la nueva tecnología pueda llegar a los pacientes.
Finalmente, le requerimos al profesional una reflexión para aquel joven que opte por la carrera de medicina. Afirmó que el estudiante debe tener en cuenta que “si hay una profesión que requiere un convencimiento, es la medicina, porque si hay dudas es preferible no seguir adelante y si entró a la facultad y hay alguna duda, también se recomienda cambiar rápido. La medicina es una profesión, pero también es una pasión, requiere de mucho sacrificio porque se sacrifica tiempo familiar y personal, pero también se debe saber disfrutar. El estudiante debe además entender que si hay algo que no se logra sin esfuerzo, es ser buen médico y si tiene la pasión y la paciencia, sin dudas es la profesión más linda del mundo”.