Hace exactamente 108 años en el local de la entonces Escuela Nro. 8 de Mercedes de 2do. grado, se fundaba la Liga Mercedaria de Fútbol, en una ceremonia iniciada a las 10 de la mañana.
Allí la Comisión Directiva provisoria estuvo integrada con Jaime Ferrer Olais, delegado por el José Pedro Varela Fútbol Club y los señores Gumercindo Maiztegui por Artigas Fútbol Club, José Albano Ferrería por el Rivera Fútbol Club, Oscar Olivera por Uruguay Fútbol Club, José Premazzi y Juan María Albano por el Club Formidable, don Polonio Garicoy y Guillermo Coll Corró por el Mercedes Rovers.
Consideradas las distintas solicitudes presentadas a la Liga por los clubes, se procedió a formar las categorías, que pasarían a disputar un premio de campeonato, donde se encontraba con una original dificultad: no había otro club para competir en Primera División con el Mercedes Rovers, institución que recientemente cumplió su aniversario.
Jaime Ferrer Olais fue el primer presidente, con la vice de Maiztegui y la secretaría de Coll Corró. Posteriormente los clubes 33, Peñarol y Bristol designaron sus delegados para integrar la directiva.
Se encargó al secretario la confección de la bandera, de acuerdo con los estatutos y la sesión se levantó dos horas después.
La primer selección
Una fecha de verdadera significación la constituyó el 4 de julio de 1909, cuando se presentó en el entonces field oficial, el seleccionado de la Liga de Mercedes, disputando un encuentro con el representante capitalino Montevideo Fútbol Club.
Integraron aquel equipo: Eduardo Etcheverri, Raúl Soriano y José Magallanes, José Biraschi, Ramón Pujado y Modesto Caresani, Ramón Elorriburu, Armando Beaulieu, Felipe Precioso, Juan Parodi y José Escurssell.
El primer título, logrado en 1934, constituyó también para la Liga de Mercedes un hito en la historia deportiva.
La Liga, antes de pasar a ocupar su flamante sede propia, ocupó como sede durante muchos años, el local ubicado en la esquina suroeste de Artigas y Paysandú.
José Pedro Young fue el primer jugador chaná que integró un representativo uruguayo en justas internacionales, mientras que Miguel Andriolo, hijo de Dolores, tuvo el alto honor de ser el primer jugador de Soriano que obtuvo la honrosa calificación de campeón sudamericano.
Otra de las instancias históricas muy recordadas, fue la presentación en Mercedes de la selección paraguaya que participó del campeonato del Mundo de 1930, jugando un amistoso en el "Mateo Funes", que terminó con el triunfo guaraní por 2 a 1. Habiendo defendido la tricolor Oleaga, Morena y Torres, Pereira, Pazos y Simone, Figueredo, Vidarte, Sosa, Valdez y Correa, este último autor del tanto.
Entre los pilares del fútbol mercedario, debe recordarse a Luis A. Zanzi, Delio González, Juan Echenique, Luis Echenique, Rogelio Sosa, Tomás Bruce, Luis R. Chelle, Edurado Víctor Haedo y Jaime Ferrer Olais.
Una de las características muy propias del ciudadano uruguayo es la de poseer su casa propia y así, en 1935 se compró el terreno frente a la calle Ituzaingó, con una acertada gestión económica y financiera, tras la cual se elaboró el proyecto de edificio que construyó la empresa Gavarone con una oferta de 5.200 pesos y que se inauguró el 10 de marzo de 1940.
El 31 de octubre de 1954, una ansiada y larga aspiración de la afición sorianense se hacía realidad: el estadio Municipal Luis Koster.
El primer campo de juego utilizado en el primitivo 1902, cuando se fundara el Mercedes Fútbol Club, primera institución del departamento, fue un terreno ubicado sobre la calle Cerro Largo, hoy Florencio Sánchez, frente a la estación del ferrocarril. Luego comenzó la mejorada en 1912 con cerco y arreglos y convertida en field oficial en 1923 con la inauguración de palcos y bancadas. En la década del 20, Peñarol, Bristol y Sandú fueron las únicas instituciones que tuvieron canchas con características oficiales.
La inauguración del Estadio Koster, Soriano y Colonia jugaron un amistoso que terminó con victoria del local 1 a 0 con gol de Pedrozo. Soriano alistó a González, Acosta y Roa, Duarte, Pedrozo y Núñez, Torres, Espalter, Rodríguez, Ferreira y Martinelli.
De ahí en adelante se fue gestando una rica historia de participaciones y triunfos, que llegan hasta nuestros días. Se han recorrido pasiones, entredichos, abrazos y enojos, de las que únicamente resurge lo más importante: la historia.