En el marco del Día Internacional de la Tuberculosis, la Comisión Honoraria reconoció a funcionarios que en nuestro país han cumplido una destacada tarea.
Por esta razón, Luis Barbita, recibió una medalla en reconocimiento por sus 47 años de labor en el centro de vacunación del Hospital Mercedes que a través de los años ha pasado por diferentes transformaciones.
Recordó que su ingreso a la Comisión Honoraria de Lucha contra la Tuberculosis, se dio un 1º de abril de 1970 tras un concurso, haciéndolo conjuntamente con Sol Charrutti y Daniel Castromán.
En esos años en el hospital Mercedes existía el pabellón de basilares con un ala para mujeres y otra para hombres, que tenía una población de internación completa, quienes eran sometidos a tratamientos que se extendían por un año y medio y dos.
Eran épocas donde también había muchos enfermos en Dolores, Cardona, constituyéndose así en otro momento de la enfermedad.
Actualmente -explicó Barbita- la realidad ha cambiado, pero la tuberculosis sigue existiendo y en Uruguay se están dando actualmente dos casos por día, situación esta que preocupa a las autoridades. Los tratamientos son más cortos, con mayor eficacia, pero siguen dándose los casos de tuberculosis que afectan fundamentalmente a personas jóvenes y que por diferentes razones se están detectando en forma tardía. Hay que recordarle a la población que si la tos persiste por más de 15 días, con un examen que se realiza en dicho servicio y para el que no se necesita orden médica, se puede detectar y diagnosticar más precozmente.
Mencionó que un 1º de enero del año 87, o sea hace 30 años, mediante un decreto el Ministerio determinó que la lucha antituberculosa se hiciera cargo del programa ampliado de vacunación, lo que se lleva adelante desde las instalaciones en el hospital Mercedes.
Todos estos años de trabajo le han permitido cosechar muchos amigos, mucha gente que reside en el interior y que cuando se producen esos encuentros fortuitos agradecen la atención que recibieron durante su enfermedad.