Las derivaciones del allanamiento ordenado por la justicia al Cambio Nelson y las declaraciones de Leonardo Fariña respecto del fallecido Wilson Sanabria, dejaron al desnudo la punta de un iceberg de corrupción, que promete convertirse en el escándalo del año.
El Juez que lleva adelante la causa de la estafa del Cambio Nelson, dispuso un allanamiento a las oficinas del Cambio en Maldonado, en busca de elementos que permitan recomponer el entramado detrás de los negocios llevados a cabo por Francisco Sanabria, actualmente prófugo en los Estados Unidos.
Leonardo Fariña que se protegió tras denunciar la corrupción kirchnerista bajo las disposiciones que alcanzan a los testigos denunciantes, dijo que Wilson Sanabria ex Sendor del Partido Colorado y padre de Francisco, era el nexo político que tenía el kirchnerismo en Punta del Este para llevar a cabo los negocios.
Dio datos concretos sobre la compra de la estancia "El Entrevero", cuando Sanabria contribuyó a aprobar el plano municipal de Punta del Este para las subdivisiones en una zona donde no se podían hacer.
Después de la compra del campo que se concretó, el kirchnerismo tenía como plan comprar una segunda parte del campo al lado de Pueblo Medellín.
Habló de las reuniones con empresarios, para ver "si podíamos quedarnos con el desarrollo del puerto del Chileno y el Casino".
El Entrevero fue comprado en 14 millones de dólares y puesto a nombre de una Sociedad Anónima, presidida por el Contador Lázaro Báez.
Una Montaña de Propiedades
En apenas cinco años como Senador del Foro Batllista, Wilson Sanabria construyó un holding multimillonario. Unas 50 empresas se combinaban entre sí, incluyendo una rentadora de autos ubicada en el Hotel Conrad que funciona como agencia de viajes y organizadora de eventos, una inmobiliaria, un cambio con once sucursales, cinco radios en Maldonado, una automotora, la representación de una importante marca de autos, una empresa de transporte de pasajeros, un tambo muy tecnificado, el 50% de un frigorífico, miles de hectáreas de campo, un importante número de propiedades inmobiliarias y la construcción de dos edificios uno de cuatro pisos en la Playa Mansa y otro de 24 pisos en la Parada 3.
Wilson Sanabria se suicidó el 31 de setiembre de 2015 y en un año y medio, su hijo Francisco dilapidó esa fortuna.
Los investigadores sospechan que vació las empresas y giró mucho dinero al exterior, por lo que la búsqueda está centrada ahora en identificar a los testaferros además de todos los depositantes de Cambio Nelson y a ubicar la ruta del dinero.