Todos los años en los meses de verano, quienes integraron la generación 64 del liceo de Rodó y tuvieron la posibilidad de inaugurar esa casa de estudios, se reúnen en diferentes puntos del departamento, viviéndose jornadas de compañerismo y recuerdos.
Olga Galín Alberro dijo que en esta oportunidad el encuentro fue en Palmitas en el domicilio de la familia Castillo-Gasco, llegando ex compañeros y docentes desde Buenos Aires, Colonia, Montevideo, Paysandú y otros puntos de Soriano.
Manifestó que para ellos haber podido tener el liceo en Rodó fue muy significativo, dado que de otra manera debían viajar para continuar sus estudios y a partir de ese año todo cambió.
Se han desarrollado encuentros en otros puntos de Soriano, Colonia y ahora se proyecta para el próximo año en un establecimiento de campo, por lo que están todos ansiosos para que llegue el momento esperado.
Galín explicó que el anfitrión es quien prepara la sorpresa, muchas veces se llevan fotos, se cuentan anécdotas y se ha logrado en varias oportunidades, acercar también a docentes de ese primer año.