El presidente de la Federación de Funcionarios de Salud Pública y de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado Martín Pereira, sostuvo en estas horas que es necesario establecer el laudo único para el trabajador de la salud con el propósito de eliminar la lógica del mercado que impone sus condiciones.
Por otro lado subrayó que existe un despilfarro de dinero en las campañas que se realizan en procura de captar socios en la apertura del denominado corralito mutual.
Pereira explicó que desde la óptica de los trabajadores resulta inadmisible ver que “una vez más en febrero las mutualistas a través de los grandes medios de comunicación gastan millones en publicidad y el tema es que son las mismas que muchas veces dicen estar fundidas o sin fondos y no vemos que desde el MSP se controle eso”.
Interpreta como representante de un colectivo social y de trabajadores que para la transparencia del sistema “esos números deberían ser públicos para que los trabajadores sepamos con las reglas que se están jugando y lo que se está invirtiendo en publicidad, cuando muchas veces se atrasa el pago de los salarios”.
En la apertura del corralito, dijo, “los trabajadores vamos a estar defendiendo a Asse por ser el mayor prestador y el que llega a todo el país; con las dificultades que tiene que evidenciamos a diario pero insistimos que tiene mucho para competir y mucha cosa buena para mostrar. En este sentido creemos que son las autoridades las que se tienen que encargar de demostrarlo y nosotros los trabajadores también decimos las cosas que son buenas de nuestro trabajo y vamos a seguir reclamando en este presupuesto todo lo que entendemos que esté mal y que haya que mejorar”.
Sistema Integrado
Con respecto a este tema el dirigente sostuvo que es necesario superar la primera etapa para avanzar en beneficio de la población. “El sistema en sí está trancado, está atrasado, queremos empezar a avanzar nuevamente; hemos avanzado en el primer período con todo lo vinculado a la instalación, pero en el segundo período el gobierno se ha quedado quieto y en este tercer período hay una chatura en la salud. Tanto en el PIT-CNT, como la FFSP estamos reclamando que haya una discusión a nivel nacional de lo que es el Sistema Nacional Integrado de Salud”.
Dijo asimismo que entiende que es prioritario que el SNIS se aboque a “mirar y pensar” la problemática del interior del país.
Manifestó entre otros conceptos que “la profundización del Sistema hay que trabajarla y discutirla y el Ministerio es un actor preponderante que tiene que salir a la cancha a jugar para que esto no se estanque y no quedemos en el mero título de Sistema Nacional Integrado de Salud. Los ejes centrales de discusión tienen que referirse a toda esta problemática ya que muchas veces los trabajadores tienen que hacer sacrificios y aportes del salario para que las instituciones no cierren”.
En este sentido, denunció una vez más el hecho que existan salarios gerenciales “que rondan los 800 mil o incluso un millón de pesos mensuales” en un contexto en el que el propio Estado realiza aportes a las mutualistas.
Aseveró que “se pone plata para obras en las mutualistas y Asse no es tratado de la misma manera, nosotros queremos que sea tratado igualitariamente para poder desarrollarnos en estas reglas de mercado, que no las compartimos para nada porque creemos que la salud es un derecho y no una mercancía, pero Asse se ve disminuida a la hora de poder captar socios de Fonasa porque corre en desventaja a la hora de competir con las mutualistas”.
Otra de las aspiraciones que plantean los trabajadores refiere a que “haya un laudo único del trabajador de la salud para que se termine esa regla de mercado de que necesito tal especialista, te pago lo que sea y te saco del sector público, pago más para que no trabajes en el público. Esa lógica se da y lamentablemente si no hay un control estatal va a ser muy difícil que se pueda cambiar eso y abogamos para llegar a un laudo único del trabajador de la salud para que se acabe esa regla de mercado que sigue vigente hoy en día”. Empero, el dirigente reconoció que “actualmente estamos lejos de ese punto”. Pereira remarcó que la salud no puede seguir siendo considerada un negocio y esa es una discusión que los trabajadores plantean desarrollar. “Para muchos la salud es un negocio y para los trabajadores es un derecho fundamental” concluyó.