El comienzo del año se viene presentando con alzas y bajas en cotizaciones de los principales productos de los que depende la balanza comercial uruguaya. Así, mientras la oferta de ganado vacuno es escasa y está expectante por precios que inducen a la suba, la inestabilidad quedó comprobada por un derrumbe en los precios de los granos. Soja, maíz y trigo en negativo.
En medio de estas variables, el mercado de los granos que ya venía en baja, acentuó la tendencia y determinó un nuevo decaimiento para los precios de la soja, el maíz y el trigo, justo en pleno desarrollo de una nueva campaña de cultivos de verano.
En este sentido los mercados están indicando que los negocios por novillos de punta se vinieron dando en el entorno de los U$S 3,50 por kilo en cuarta balanza, para la vaca en el entorno de los U$S 3,10 y para la vaquillona para abasto entre U$S 3,30 y U$S 3,45.
Se advirtió que hay plantas frigoríficas que tienen previsto reducir la faena en las próximas semanas con menos días de actividad. En materia de granos, el informe mensual publicado la semana pasada marcó el precio más bajo (menos de U$S 400 la tonelada) por primera vez desde que está ofrecida la compra de soja en Uruguay.
El maíz comenzó a cotizar la semana con poco más de 160 dólares, mientras que el trigo forrajero tiene valores de U$S 160 y la cebada U$S 145 la tonelada.
En la soja y el maíz cuyos rindes han superado los históricos 5.000 kilos por hectárea, con un buen rendimiento también en cebada, encuentran una compensación que tiende a equilibrar números pero no satisface la expectativa del productor.
En materia de leche, mejoraron las condiciones productivas en los tambos, donde persisten dos dificultades: el bajo precio del producto y el endeudamiento asumido durante la sequía.
Finalmente en cuanto a las frutas y verduras, se constató una baja en los valores de zanahoria y cebolla a nivel mayorista, donde los valores difieren según los lugares donde se efectúe la compra en los mercados, y algunos indicadores extienden esa constante para morrón amarillo, papas, boniatos, lechuga, choclo y tomate cherry, a diferencia del durazno, melón y limones que han tenido crecimiento.