Fueron los casos más dramáticos donde exactamente el mismo día con 12 años de diferencia, el fenómeno de los desbordes se abatió sobre el barrio.
Casi ocho años después y tras tareas de entubamiento, el volumen de agua fue tal que superó toda previsión.
La imagen superior fue captada en la zona de Cañada de los Hornos donde el desborde terminó con la vida de numerosas aves de corral y gente que, como ahora, quedó con lo puesto.
Afortunadamente en ninguno de los tres casos hubo que lamentar víctimas, aunque la fortuna jugó a favor de los vecinos ya que la inundación de tendidos eléctricos y la situación de algunas fincas donde residían personas muy ancianas, pudo provocar problemas muy serios, especialmente por la imposibilidad de ver en la oscuridad de la noche.
La situación del 26 de diciembre de 1997 se registró sobre las 7 de la mañana cuando cayeron 120 milímetros en una hora, provocando una inusitada corriente de agua que arrasó modestas viviendas en los barrios Cerro y Aparicio Saravia.
En aquel momento el vecino Justo Pozzolo que residía entonces en la zona, recordó que en 1982 un fenómeno similar se había abatido sobre el barrio, tras lo cual se hicieron trabajos para limpiar la zona.
También se evacuaron 14 familias con urgencia que se derivaron al Estadio Koster, convertido en un improvisado albergue.
En 2009 también el fenómeno fue en las primeras horas de la mañana, donde los bomberos recibieron más de 40 llamados en una hora, contabilizándose 130 milímetros en 3 horas y 175 milímetros en Paso Lugo.