El fuerte temporal de lluvia y viento que dejó en Salto 25 árboles caídos, estuvo a punto de transformarse en una tragedia, cuando dos pequeñas de 12 y 13 años fueron alcanzadas por una pared que se derrumbó. La más grande dormía en su habitación y quedó prácticamente cubierta de escombros, según el relato de su padre.
Al no responder a los primeros auxilios, la familia temió lo peor, pero finalmente ambas al igual que sus hermanas de 8 y 2 años, se encuentran fuera de peligro y pasaron a alojarse en la casa de un vecino. La pared sufrió el embate de un árbol muy cercano a la misma, que se volcó pesadamente por efecto del viento. El hecho ocurrió próximo a las seis de la mañana y afortunadamente no pasó a mayores.
La turbonada dejó varios daños más haciendo caer algunas columnas del tendido eléctrico, que afectaron el suministro que posteriormente logró ser reestablecido.
Inumet ha mantenido el alerta tras los vientos de casi 90 kilómetros que se verificaron en el norte, habiéndose afectado los techos en cinco casas mientras que varios invernáculos resultaron destruidos.