La invasión a la Franja de Gaza que busca "destruir completamente a Hamás", mostró su peor cara con decenas de miles de palestinos protagonizando un éxodo masivo hacia el sur entre bombardeos y escenas de caos y desesperación.
La criminal invasión del sábado trajo como consecuencia la reacción israelí que se preparaba ayer para atacar Gaza por tierra, mar y aire. Antes anunció que había vencido el utlimátum para que los palestinos que estuvieran en el norte dejaran sus casas antes del ingreso de las tropas. Así, se comenzó a observar a decenas de miles de civiles huyendo hacia el sur de la franja, mientras más de 2.200 personas se contabilizaban muertas por los bombardeos sobre Gaza, y al menos 8.700 habían resultado heridas.
El gobierno de Estados Unidos había emitido ayer sábado una recomendación dirigida a los norteamericanos en Gaza para que se desplacen hacia el sur, camino del cruce fronterizo entre Rafah y Egipto, única vía de entrada a la Franja, de la ayuda humanitaria.
En las últimas horas hubo conversaciones entre Washington, Israel y Egipto, para permitir el paso de los palestinos-estadounidenses a través del cruce.
Por otro lado, Irán advirtió anoche a Israel que detenga los ataques porque la situación podría salirse de control y tener consecuencias de gran alcance, calificando la invasión a Gaza como "crímenes de guerra y genocidio".
Arabia Saudita pidió a China que presione a Naciones Unidas para un alto del fuego en Gaza que está al borde de una catástrofe humanitaria.