Carlos Albisu, un médico otorrino cuestionado por la cantidad de militantes en su sector que ingresaron a Salto Grande con salarios de entre $ 80.000 y $ 300.000 mensuales, terminó renunciando. La decisión la tomó el Presidente Lacalle pero Albisu en una conferencia de prensa dijo que había sido él quien presentó la renuncia para no dañar al partido.
Comisión Técnico-mixta de "ASALTO Grande" había publicado ayer el Diario Crónicas del Este en relación a la catarata de denuncias que desde hace dos años se vienen acumulando en contra del ahora renunciante Presidente de la CTM. Las denuncias establecen que la plantilla de empleados de la delegación uruguaya en la Comisión Binacional, subió de 235 a 260 en dos años, con un aumento de casi el 11% pese a las jubilaciones y pre-jubilaciones.
El 75% de los nuevos ingresos fueron ingresos directos para reconocidos militantes y dirigentes de la Lista 404 del Partido Nacional de Salto, que encabezaba Albisu.
Los salarios van desde $ 83.487 el que gana menos a $ 291.000 mensuales y uno de los sueldos más altos es el del actual Vicecanciller Nicolás Albertoni, que, tras ingresar en 2020 a Salto Grande, pidió licencia y reservó su calidad de funcionario para cuando finalice su empleo administrativo.
El Frente Amplio mantiene la decisión de interpelar al canciller Bustillo y a la Ministra Arbeleche, mientras el líder de Cabildo Abierto Guido Manini dijo que la renuncia de Albisu no soluciona el cúmulo de manejos irresponsables y corruptos que incluyen la designación de un edil para puestos de altísima especialización, refiriéndose a Carlos Silva, edil de la 404 de Salto, que fue nombrado secretario con un salario de $ 263.304 mensuales.
El mismo día de noviembre pasado también ingresaron los ediles José Ambrosoni y Martín Burutarán, percibiendo $ 131.231 y $ 213.633 en carácter de "asesores" sin especificación de cargo.
Cuando hace dos semanas la Comisión pidió un refuerzo de rubros ya que el dinero no alcanzaba, se desataron las protestas que primero llegaron a la prensa y luego a la propia Torre Ejecutiva donde el Presidente había anunciado que "no nos temblará la mano si hay que tomar medidas ante posibles exageraciones".
Tras expresiones del Senador Sánchez en cuanto a que Salto Grande es una cueva de Alí Babá, su colega Jorge Gandini dijo que está elaborando un proyecto para aprobar una reglamentación que evite cualquier tipo de manejos indebidos y especifique la forma en que tendrá que ser integrada cualquier delegación representativa del país en la Comisión que se comparte con Argentina.