Con excelentes rindes se cerró la cosecha de cebada recibiéndose en los silos de Calmer ubicados sobre camino Pense, unas 21 mil toneladas.
El jefe de planta, Ingeniero Agrónomo Eugenio Posse, mencionó que la cosecha se inició en la segunda quincena de noviembre y los primeros días el ingreso fue suave, mientras que sobre fines de ese mes se dinamizó, culminando al mes de iniciada la misma.
Consideró que fue importante en cuanto a volumen y calidad, recibiéndose en esos silos unas 21 mil toneladas en diferentes variedades y seguramente todas irán a malteo.
En cuanto a calidad también hay conformidad, el tamaño de granos fue mejor que el del pasado año en el entorno del 94 (la base es 85), con una proteína cercana al 11% y el rendimiento general en las chacras fue muy bueno. Posse recordó que parte de la cebada se destinará a exportación y otra para el mercado interno. Mencionó que Calmer tiene un área importante de siembra de cebada para sus planes que están por fuera de la planta Mercedes y se recepcionan en otros lugares, teniendo un volumen que es el doble al mencionado anteriormente.
Además de este tonelaje mencionado para procesar, se han producido unas 5 mil toneladas de cebada para semilla para guardar y procesar en la nueva siembra que será por mayo o junio.
Consultado si el área sembrada aumentó, el Ingeniero manifestó que sí porque este año no hubo demasiado trigo y el área sembrada por Calmer en cuanto a cebada fue mayor a la de la última zafra.
Finalmente consideró que esta ha sido muy buena en cuanto a la calidad de los granos, muy vendible y los productores están conformes porque el rendimiento hectárea estuvo por encima de los 3.500. Reconoció que aunque los precios de los granos no están firmes, han ido a la baja en los últimos años, el resultado en general conformó.