Un hombre de gruesa complexión y de rostro cubierto ingresó al supermercado La Proa, uno de los principales comercios de Young. El delincuente sabía que el local tenía la alarma desconectada.
“Siempre me llaman a toda hora y por cualquier ruido. Esta vez la alarma no sonó, no se activó ningún sensor. El que entró se tomó todo el tiempo del mundo, estuvo 40 minutos hasta que se hizo del dinero”, manifestó la encargada del comercio.
El hecho ocurrió a las 3.30 de la madrugada del lunes en la Ruta 3 y Zeballos.
El delincuente logró llevarse $ 960.000, un monto que iba a ser destinado al pago de proveedores. “Era la recaudación de todo un fin de semana que se guarda en el local comercial porque en Young no tenemos buzones del banco para ir depositando el dinero”, dijo la encargada.
El caso está en manos de la la Policía y personal de Jefatura de Río Negro apoya la investigación en Young.