Fuentes del Poder Ejecutivo, confirmaron que el proyecto de Inclusión Financiera tiene cuestionamientos en la interna del gobierno y hay jerarcas que reclaman cambios.
El punto central es que los bancos no están ofreciendo las contrapartidas que se esperaban, como préstamos sociales blandos y financiación para la compra de viviendas.
Otro de los puntos que se cuestionan, es que las instituciones bancarias le cobran a pequeños comercios un porcentaje de las ventas con tarjeta del 4.9 % y sin embargo a las grandes superficies la tasa es solamente del 1 %.
El planteo de cambio, pasaría por exigir al sistema financiero, que por lo menos un 10 % de la cartera de créditos se destine a las microfinanzas.
También se plantea que se bajen los aranceles que cobran las tarjetas a los comercios más chicos.