Usuarios pobres y prestadores de salud millonarios, no caben en la interpretación de los funcionarios de la salud, cuya delegación estuvo ayer en Mercedes para explicar alcances de la segunda etapa de la reforma del sistema. Se reunieron durante más de tres horas en instalaciones del Centro Papelero para explicar los alcances de la propuesta.
Aunque la FUS está de acuerdo con una segunda etapa de la reforma sanitaria entiende que hay aspectos que deben ser tenidos en cuenta y que tienen que ver con la cotidianeidad como los tiempos de espera y la falta de coordinación entre lo público y lo privado.
Jorge Bermúdez que estuvo también acompañado de Pablo Cabrera para mantener reunión de trabajo con dirigentes locales, dijo que la Federación seguirá impulsando su línea de trabajo porque se entiende que lo principal es profundizar la reforma pensando en el pueblo y “esa es nuestra apuesta”.
El Secretario General sostuvo que al reforma está “congelada”, “detenida” y por tanto se está de acuerdo con la profundización de la misma pero se apuesta a que en esta instancia “se ataquen a las corporaciones médicas, que siguen siendo las principales opositoras. Por tanto, la posición de la FUS sigue siendo la misma de siempre”, agregó.
Recordó que la idea del actual Sistema Nacional Integrado de Salud surgió en Mercedes en abril del 2003 en el marco del 11º Congreso de la Federación, y se lamentó que a pesar de ello “La salud muchas veces opera como una mercancía a pesar de que la reforma sanitaria fue planteada como un derecho en el año 2007, cuando se aprobó en el Parlamento”.