La Junta de Soriano tributó reconocimiento a las mujeres rurales en forma conjunta con el Grupo Cultural Charrúa quien ha venido en el transcurso de los años llevando adelante una serie de actividades.
El Presidente de la Corporación destacó la importancia de esta franja societaria en la contribución del desarrollo del país.
El edil Roque Maciel, manifestó que a nivel mundial las mujeres rurales representan más de un tercio de la población mundial y el 43% de la mano de obra agrícola. Labran la tierra y plantan las semillas que alimentan a naciones enteras y además garantizan la seguridad alimentaria de sus comunidades y ayudan a preparar a esas comunidades.
Maciel dijo que en el Uruguay ha comenzado a crecer sustancialmente el reconocimiento a estas mujeres, comprendiendo y valorando su aporte.
Interpreta que aún resta mucho camino por andar porque se debe pasar de las palabras y los elogios a los hechos concretos que signifiquen un verdadero apoyo y auténtico reconocimiento, más allá de ideologías de género “que no conducen a nada”.
Añadió que “vale la pena, que en este ámbito representativo de la ciudadanía, reconozcamos a estas mujeres rurales por su realización comunitaria.
Lo hacemos con el simple hecho de entregar un diploma de la organización que las representa, pero más allá de ello, sería importante que surja de nosotros el compromiso real, de actuar desde nuestras respectivas órbitas, con lealtad y justicia para que sus derechos y reclamos sean reconocidos legalmente y se valore con esa misma legalidad el trabajo incansable de estas trabajadoras”, concluyó, reconociendo que ha sido el Grupo Cultural Charrúa el dueño de la iniciativa.
Por su parte, tanto la Directora del Grupo Cultural Patricia Amarillo y el Secretario Guillermo Bertullo resaltaron que a lo largo de la historia uruguaya la mujer rural ha debido evolucionar y adaptarse a los cambios sociales silenciosamente. Como un proceso de metamorfosis. Donde comienza teniendo su participación como esposa, madre, pilar nutritivo, en el núcleo familiar. Cooperando no sólo en las tareas del hogar, sino que poco a poco se va involucrando en las tareas productivas y reproductivas, base del sustento.
“Desde que tuvo que ser peona rural sin salario y más tarde asalariada, hasta que la vorágine y la necesidad la obligaron a mostrarse al mundo. Debiendo comercializar sus productos, sus producciones y todo lo que la explotación de la tierra le proporcionaba.
Así comienza a oírse la voz de la dama rural, de la mujer de campo, de la madre, de la esposa, amiga, productora y vecina.
Transitando el siglo XXI, ella, la mujer, continúa ese proceso de transformación y progreso que viene de la mano de la tecnología y la globalización”.
Las reconocidas
Fueron 23 las mujeres reconocidas aunque sin lugar a dudas hay muchas más en todo el departamento: Juana Romero, Sandra Gutiérrez, Antonia Jamen, Felicia Jamen, Irma Silva; María Sarnikov; Hilda Morel; María Elena Trujillo; Marvel Maldonado; Verónica Espinosa; Rocío Golly; Jennifer Ortega; Agustina Ortega; Nelly Maneiro; Sonia Vique; Claudia Frascheri; Yolanda Frascheri; Vivian Guerein; Andrea Reyes; Lourdes Chávez; Julieta Batochi; Emilce Bacciarini; Martha Nieves.