La AUF publicó la carta que la FIFA envió confirmando que el volante de la selección sub-20 no será sancionado tras una infundada acusación de racismo.
Mucho se habló en Corea del Sur del festejo de Federico Valverde tras marcar el primer gol de Uruguay en el encuentro de cuartos de final del Mundial sub-20 ante Portugal. Luego de convertir el 1-1 parcial de penal, el volante del Real Madrid estiró sus ojos y los dejó rasgados, emulando los rasgos de un rostro asiático.
En suelo surcoreano la celebración fue tomada como una ofensa, pero el propio jugador se encargó de aclarar que se trató de una dedicatoria para un amigo. El destinatario era Edgardo ‘Chino’ Lasalvia, a quien el Pajarito ya había dedicado algunos de sus tantos cuando jugaba en Peñarol y en la selección sub-17.
La FIFA observó a Uruguay por el hecho, al que sumó los festejos del plantel en el vestuario (todos los jugadores tocándose la sien en señal de ‘estamos locos’), pero no hubo consecuencias. La Asociación Uruguaya de Fútbol presentó un escrito y el tema se da por laudado, según se desprende del comunicado que la FIFA envió a la AUF.
“Quisiéramos informarles en nombre del presidente en funciones de la Comisión Disciplinaria de la FIFA, que la información y las pruebas en nuestra disposición no justifican la incoación de un procedimiento disciplinario por parte de la Comisión de Disciplina de la FIFA”, aclaró la entidad rectora del fútbol mundial.