Una situación incomprensible se volvió a vivir al término del partido de ayer cuando fanáticos enfervorizados atacaron a pedradas el ómnibus de la delegación de Mercedes.
Tras un cotejo que fue limpio de principio a fin, un grupo de inadaptados emprendió contra el ómnibus rompiendo varios vidrios. Durante la transmisión que vía streaming realizó el colega William Oxandabarat se pudo observar un estado de locura con provocaciones enfrentadas que parece lejos de ser erradicada. En efecto, durante toda la transmisión pudieron verse mensajes prácticamente cada 2 segundos escritos por parciales de Mercedes y de Bella Unión en el que mutuamente se desafiaban. Incluso ninguna de las partes tuvo inconvenientes en publicar sus mensajes con nombre propio. Un tema a analizar y que en parte es responsabilidad de las propias plataformas que permiten difundir este tipo de provocaciones ya que existen formas de bloquearlas en razón de que estos insultos cruzados y desafíos no conducen absolutamente a nada.
Quizá el resultado contundente enfríe a los hinchas norteños, pero si así no fuera la revancha en el "Koster" puede volver a ser caldo de cultivo para otra instancia de violencia a la que parece cada vez más difícil erradicar.
Habrá que actuar de otra manera y aplicar medidas mucho más duras porque la cosa se está poniendo cada vez más difícil.