El festejo de los 100 años de Juana María del Pilar Ruiz estuvo cargado de emociones, numerosos encuentros y llamados. Su figura permanece aún en las retinas de muchos en la puerta de su farmacia ubicada en Ferrería y Haedo.
Junto a sus sobrinas Elena e Inés, Crónicas accedió a dialogar con esta apreciada vecina que siempre residió en el barrio de la Escuela Técnica y que además brindaba una permanente atención a quienes necesitaban algún medicamento de su farmacia, atendiendo inclusive en horas de la madrugada.
Fue una de las primeras químicas farmacéuticas de Mercedes y la única que instaló una farmacia en diciembre del año 1948. Pilar trabajó en el Hospital Mercedes, fue docente en Biología y Física.
Afirmó que “con la farmacia tuve una oportunidad única, trabajé mucho, pude estar al lado de la gente porque yo hacía el horario nocturno en forma permanente. Mis años transcurrieron entre la docencia y la farmacia, tengo gratos recuerdos de mis alumnos y de toda la gente que siempre me acompañó”.
Dijo no tener una fórmula para llegar a los 100 años en tan buena forma, indicando que “tuve una salud a toda prueba, nunca tomé medicamentos, lo único que consumía era una pastilla de 10 mg para mantener una presión normal. Siempre me gustó comer bien, tenía más peso que ahora, aunque por estos días como un poco menos.
Llegué a los 100 y celebraré los años que Dios me mande. Siempre he sido muy creyente y la fe puede todo, ayuda a vivir”.
Hablamos con Pilar también sobre cómo recuerda ella la creciente del año 59, señalando que “cuando ocurrió este hecho, desde la Intendencia se nos había dicho que si sonaban las campanas de la Catedral debíamos correr hacia calle Rivas donde iban a estar prontos los camiones para sacarnos de la ciudad. En una de las noches más cruciales de la crecida, mi hermano de pronto sintió las campanas, según él, pero después supimos que era el viento y contaba que miraba hacia la calle y el reflejo de la luz simulaba que había agua. Fue una noche en que prácticamente no dormimos porque después quedamos todos muy nerviosos”.