Salvo ayer, en las cinco jornadas previas, el mercado de cambios negoció montos abultados —muy por encima de lo habitual— y el BCU salió a vender reservas para suavizar la suba del dólar. Esta operativa inusual del mercado de cambios se dio en buena parte por la crisis argentina, donde se desató una corrida cambiaria la semana pasada
El Central resolvió ayer tomar la primera medida ante la situación argentina para calmar al mercado y dar una señal de que quiere un cambio de portafolio (de pesos a dólares) ordenado, según coincidieron analistas y operadores.
"Dado el entorno macroeconómico y financiero global y regional el Banco Central ha decidido efectuar una operación de recompra de Letras de Regulación Monetaria (LRM) en pesos con vencimientos no mayores al 31 de diciembre de 2018 por un valor nominal de hasta $ 30.000 millones", indicó un comunicado del BCU.
"El objetivo de la oferta de recompra de LRM es poner a disposición de los agentes económicos una alternativa que viabilice de forma ordenada cambios deseados en sus portafolios", agregó.
Para ello, los bancos, AFAP y otros inversores que tengan Letras, "efectivizarán el cobro de los títulos vendidos al Banco Central en dólares estadounidenses o pesos uruguayos de acuerdo a su elección", explicó la autoridad monetaria.
De esa forma, si una AFAP o un banco quiere pasarse a moneda extranjera, en vez de cobrar la Letra en pesos e ir al mercado de cambios a comprar dólares puede hacer la operación directo. De esa forma, no pasa por el mercado de cambio y no agrega presión al alza del dólar por ese cambio de portafolio.
Los $ 30.000 millones que el BCU está dispuesto a recomprar (recibirá ofertas entre el 10 y el 12 de este mes) equivalen hoy a US$ 914,1 millones.
"El BCU reafirma la decisión de utilizar en su gestión de política monetaria y de deuda, todos los instrumentos disponibles a efectos de que los shocks externos no se transmitan infundadamente a los mercados domésticos", indicó el comunicado. "Es como poner la plata arriba de la mesa y decir: vengan que hay, no hay problema, pero no pongan más volatilidad en el mercado", resumió un operador.
Para el socio de Deloitte, Pablo Rosselli "en términos prácticos, esta operación muestra al BCU dispuesto a vender una cantidad muy significativa de dólares" y así "facilitar el cambio de portafolios que se está observando en estos días".
Agregó que "con este anuncio el BCU intenta moderar la demanda de dólares y estabilizar el mercado luego de la operación. Para los inversores, si deciden participar de la operación, una decisión clave es el precio al que están dispuestos a vender sus Letras. Presumiblemente, esta operación mostrará que las tasas de interés de la recompra de Letras terminarán siendo mayores que las tasas que venía pagando el BCU".
Según Rosselli "más allá de que la operación puede facilitar el cambio de portafolios, estas intervenciones no modifican de un modo significativo el valor de mediano plazo del dólar".