Un profundo análisis de la complicada situación por la que atraviesa no sólo Río Negro, sino todo el país, fue realizado por el Director de Obras de Río Negro Fernando Cabezudo después de una reunión en la que participaron el Director de Desarrollo Jorge Firpo, la Ing. Silvanna Mazza Directora de Proyectos de Vialidad y Cabezudo. Este último expresó que: se recogió la demanda que se origina en los disintos puntos del territorio agregando que: " Río Negro es un departamento complejo por su estructura territorial, por la diversidad y cantidad de producción que tiene, por la naturaleza de los materiales que se encuentran en el subsuelo para la construcción de caminos, por el explosivo volumen de carga que ha tenido el país en general y el departamento en particular en los últimos años (fundamentalmente soja y madera)”.
“Los recursos que recibimos nos permiten mantener entre 400 y 500 Km., de un total de 1.400 Km. de caminería que tiene el departamento”.
“Nuestro territorio tiene una particularidad; reúne características de departamento del centro del país y del litoral; claramente delimitado por Ruta 3 y cuenta con recursos que son acotados y limitados como todo recurso público.
En el tema caminería rural, pesan los recursos que transfiere el gobierno nacional a las intendencias, ya que son cantidades que no han ido acompañando la exigencia que hoy tiene la caminería. Lo que recibimos nos permite mantener entre 400 y 500 Km., de un total de 1.400 Km. de caminería que tiene el departamento.
Es totalmente insuficiente y se transforma en un desafío. Lo que hacemos es mantener la transitabilidad y garantizarle a la gente que pueda salir, siempre y cuando no nos enfrentemos a una situación de emergencia por lluvias como la que vivimos en 2016”.
Para realizar un tratamiento extraordinario que dure 5 años, con mantenimiento de caminos, la Intendencia tendría que disponer entre 100 y 180 millones de pesos por año, contra los 30 millones que tenemos.
“Garantizar la transitabilidad de los caminos es un desafío. No lo puede resolver el presupuesto de la intendencia ya que excede largamente la disponibilidad de recursos. Es imposible pensarlo de esa manera.
Estamos en una crisis de crecimiento de país; creció mucho la producción pero no crece nuestra capacidad de inversión para acompañar ese aumento en la producción.
Lo que estamos haciendo es lo que hoy podemos hacer; garantizar la transitabilidad; no una calidad uniforme, constante y en todo tiempo de los caminos, de eso estamos lejos porque hay que disponer de mucha plata.
Para poder conservar esa transitabilidad es imprescindible contar con la cooperación de todos los actores en el territorio.
La intendencia viene trabajando en concretar convenios marco; lo ha hecho con buena parte del sector forestal, con cada uno de los actores que han habilitado algún tipo de acuerdo específico; de manera que ya el territorio pone en la caminería los acuerdos para una mejor gestión de los caminos”.
“El ejercicio está abierto a todos los actores en el territorio para explorar los caminos y encontrar acuerdos para mejorar la gestión”.
“Hay pendiente un texto, que el ejecutivo elevará a la Junta Departamental, cuando haya una cantidad suficiente de actores comprometidos en el tema, para mejorar la gestión de la caminería.
De nada sirve tener una ordenanza que habilite a la intendencia a multar los camiones que circulen en días de lluvia, si no hay un compromiso de los distintos actores.
Hoy lo expresamos en la reunión de la Mesa de Desarrollo Rural; el ejercicio está abierto a todos los actores en el territorio para que, a través de la Dirección General de Desarrollo y Descentralización, exploremos los caminos de cuáles son los acuerdos a los que podemos llegar.
No vamos a resolver el problema pero sí vamos a disminuir las emergencias y ese es el camino que estamos recorriendo en caminería, con la gran dificultad que significa no contar con los recursos mínimos necesarios. Por eso apuntamos a mejorar en gestión, y ese es el desafío”.