Un procedimiento realizado por funcionarios de Aduanas en el Puente General San Martín, permitió incautar dispositivos electrónicos, prendas de vestir, perfumes y relojes que se pretendían ingresar de contrabando al país.
El control detectó que efectivamente, además de la carga declarada en el Documento Único Aduanero, el camión transportaba un significativo contrabando, cuyo valor superaba en un 900% a lo declarado.
La documentación con la mercadería partió desde la Zona Franca de Libertad e iba con destino a la Zona Franca de La Plata, en Argentina. Solo habían sido declarados equipos de audio.
Entre las mercaderías incautadas fueron contabilizados: 1.300 joysticks, 4.300 prendas de vestir, 1.700 prendas camufladas y artículos militares de uso civil.
Además, fueron encontrados 20.400 discos, más de 1.000 celulares, 20 batidoras y 6 planchas industriales, unos 1.100 perfumes y 1.300 relojes marca Tommy Hilfiger.
También pretendieron ingresar de matute 450 cámaras fotográficas, 20 filmadoras, 3 drones, 1 moto Honda y 40 equipos de uso médico.
El valor total de lo incautado en infracción aduanera asciende a los 535.000 dólares.
La jueza de Fray Bentos, Carol Ceraolo, dispuso la incautación de la mercadería y del vehículo, así como el emplazamiento judicial del conductor del camión, del representante de la empresa transportista y del despachante de aduana.
Los representantes llegaron desde Buenos Aires y Montevideo. Se presume que la operación fue gestada desde Miami.
Una fuente de la frontera consultada estableció que si se revisaran todos los camiones que pasan en tránsito hacia Argentina, diariamente se encontrarían casos de contrabando a gran escala.
